Los principales atractivos de Santa Pola son sus restos históricos, su puerto, sus salinas y sus playas dotadas de bandera azul, símbolo de calidad ambiental otorgado por la Fundación Europea de Educación Ambiental. El topónimo Santa Pola es una derivación de Santa Paula, a su vez derivado del nombre latino del apóstol San Pablo que, según la tradición, desembarcó en la isla de Tabarca. No obstante, es muy probable que la relación con San Pablo sea una etimología popular proveniente del latín palus ("humedal"), que por metátesis pasaría a pauls y de ahí a pol. Es un municipio costero, con 52,8 km² y la mayoría está protegido por parajes naturales. El núcleo de la población se desarrolla teniendo el puerto y el castillo como centro, pero limitado por dos parajes naturales que lo flanquean. Al oeste, se encuentra el Parque Natural de las Salinas de Santa Pola, y al este, se encuentran la Sierra y el Cabo de Santa Pola.La línea de costa tiene 13 km y se puede dividir en varios sectores. Desde la frontera sur con Elche hasta el casco urbano encontramos una fina franja de arena, que es la que separa las salinas del mar; en esta zona se encuentran las playas de El Pinet y La Gola.
Las playas urbanas son la del Tamarit, Lisa y Gran Playa al oeste del puerto; y al este la de Levante, las calas de Santiago Bernabéu, (una sucesión de pequeñas playas separadas artificialmente mediante espigones) y la del Varadero, que se encuentra junto a los astilleros. Desde ahí en adelante, toda la costa del cabo es estrecha y accidentada, con pequeñas calas que se encuentran bajo el acantilado.
El cabo en sí es vértice geodésico de primer orden y se conoce también como cabo de l’Aljub. Tiene sobre él un faro de tercer orden instalado desde 1.858 sobre la antigua torre de la Atalayola. Frente al cabo, a menos de 3 millas náuticas (5,56 km), se encuentra la Isla de Tabarca, también llamada Isla Plana o de Santa Pola, que pertenece al municipio de Alicante.
La pesca, por su parte, ocupaba al 8,13% y, aunque con cierto peso, ya no reviste la gran importancia que tuvo hasta la década de 1.980, cuando era la sede de la mayor flota pesquera valenciana y sus barcos (con casi 1.700 marineros) se dedicaban a la pesca de altura en el mar de Alborán y en las islas Canarias.7 Actualmente en Santa Pola sólo quedan barcos pequeños que faenan entre las costas española y argelina y el volumen de pesca desembarcada ha caído de las 6.000 ó 7.000 toneladas de la década de 1.970 a las 4.151 de 2.001 y a sólo 2.753 en 2.003. Las mayores capturas son de pescadilla, salmonete, crustáceos y moluscos, que son comercializados en la misma lonja y distribuidos por toda la franja litoral desde Alicante hasta Almería.



Como platos típicos, además, sobresalen el gazpacho de mero, el blanquillo de rape, guisado de sepia y sin duda, el principal manjar a base de pescado es el “caldero”. Entre los pescados, los más solicitados son la dorada, lubina y la lechola.
Por aquel entonces la actual Santa Pola era conocida por el Puerto del Cap de l'Aljub.